Todo comenzó con una rabiosa necesidad de entenderme a mí misma y poner a prueba mis límites. ¿Has escuchado el dicho… “tener muchos talentos puede ser una maldición más que una bendición”? ¡Ja! Pues bien, desde siempre tuve una gran necesidad de averiguar quién era y hacer sentido a tantos intereses distintos.
Tenía que encontrar la manera de conectar mi colección de pasiones con un solo propósito.
Después de 10 años, de lo que ahora llamo mi década de “hermoso caos”, un viernes al mediodía, lo supe, nunca lo voy a olvidar, estaba sentada compartiendo un shawarma de pollo con un amigo, maravillosamente iluminado, con quien intercambiaba lecciones de baile de Salsa por prácticas de meditación Qigong. Ese día le conté, con una sonrisa totalmente satisfecha, de una cliente muy especial, que al hacer un movimiento de baile específico pudo, por primera vez, verse en el espejo con una mirada compasiva y celebratoria, en lugar de la habitual mirada negativa y auto-destructiva – y de cómo ese acontecimiento había sacudido mi mundo. Le confesé a mi amigo que esa sonrisa me hizo sentir como ninguna otra cosa me había hecho sentir antes.
Mi amigo me dijo, con su habitual tono calmado: “Mari… es muy simple. Estás descubriendo que coleccionar medallas y títulos no es nada comparado a inspirar a alguien”. Eureka!!! En ese momento aprendí una valiosa lección: Compartir es mucho más satisfactorio que acumular.
Desde entonces, he estado fascinada por el placentero y estimulante poder de inspirar a otros.
Después de titularme como Coach Holístico de Estilo de Vida Saludable por Chek Institute de San Diego, California y obtener la titulación de Coach Personal y de Marca Personal por TISOC en Barcelona, emprendí un camino para ayudar a otros a desarrollar su máximo potencial.
En esta trayectoria descubrí que existía un enorme potencial de transformar la cultura y beneficiar a muchas personas simultáneamente al trabajar con líderes empresariales y equipos de trabajo.
Y es así cuando decido certificarme como Coach Ejecutivo en INCAE Business School y participar en el programa de Estrategias de Facilitación Efectiva por Harvard University; enfocando una gran parte de mi energía en el área organizacional.
A la fecha, he tenido la oportunidad de trabajar con más de 55 clientes corporativos, ubicados en 26 países distintos. Y me encanta pensar que este es solo el comienzo.
En este camino, no he estado sola.
A Diego lo conocí cuando yo tenía 15 años. Siempre me gustó, pero en ese momento, él ni me volteaba a ver. ¡Jajajaja!
En el 2002, estudiando ambos Biología en la Universidad de Costa Rica, nos reencontramos.
Comenzamos a salir, pero seis meses más tarde, yo me fui de intercambio.
14 años después, con muchas vivencias a cuestas y con mucha más madurez, nos volvimos a ver.
Y desde ese día de reencuentro en el que salimos a almorzar sushi, nunca nos hemos separado; En el 2019 nos casamos!!!
Y así, sin saberlo, nuestra historia nos llevó a convertirnos en un equipo, de fortalezas complementarias, esfuerzo mutuo y balance
constante de energía.
Por un lado Diego, con su background gerencial, es un hombre operativo, financiero y administrativo. Y yo, siempre libre y energética, cargada de un enfoque de creatividad, desarrollo de ideas y generación de contenido.
Juntos, obtenemos una suma de sistematización, estructura, orden, análisis y pensamiento crítico; con lo artístico, espontáneo, creativo y la sensibilidad de conectar e inspirar a las audiencias.
Incluso podemos celebrar que creamos nuestros propios pilares:
RIEDAD
¡Las oportunidades simplemente llegan en el momento correcto!
Como parte del efecto de la pandemia, el crash de turismo en Costa Rica impactó a la empresa para la cual Diego trabajaba. Y esto representó un reto para ambos; que decidimos asumir como una oportunidad, pero…¿oportunidad de qué? de finalmente, adelantar una idea que veníamos conversando aún sin fecha definida: unir fuerzas en la línea de negocio digital potenciando el desarrollo de nuevos productos y servicios.
Así es como juntos decidimos crear Hotminds; una aventura que, nosotros como compañeros de vida y socios, definimos como:
la suma
de una fuerte
dosis de realidad
adaptación /
transformación
complementariedad
de skills
alta
empatía
Ahora, más que nunca, sabemos que el verdadero trabajo en equipo, es LA CLAVE para alcanzar el éxito a través de circunstancias cambiantes y desafíos que esta maestra vida nos presenta.